El queratocono se produce cuando la córnea sufre un adelgazamiento y contradictoriamente se desarrolla una protuberancia. Queratocono de manera literal significa “córnea en forma de cono”.
La córnea es la estructura transparente que cubre el ojo y que refracta o enfoca los rayos de luz para que podamos ver de forma clara. Es una parte fundamental de nuestro ojo y cuando se produce el queratocono la visión se distorisona y nos impide ver claramente. Esta afección impide actividades comunes como conducir, leer, utilizar el ordenador o ver la televisión.
Los científicos no saben la causa exacta que da origen al queratocono pero piensan que el componente genético es en gran parte conscuente, ya que tras los casos estudiados se ha demostrado que un 10% de las personas afectadas por esta enfermedad tenían un familiar que también la sufría.
A parte de la genética tienen un efecto directo las lesiones en los ojos o el uso excesivo de lentes de contacto, además de algunas enfermedades como la retinitis pigmentaria, la queratoconjuntivitis vernal y la retinopatía prematura. Otras enfermedades sistémicas también se encuentran relacionadas con este tipo de trastorno, entre ellas: síndorme de Down, síndrome de Ehlers-Danlos y la osteogénesis imperfecta.
De manera general, los dos ojos se ven afectados por el queratocono y los síntomas se suelen dar durante la adolescencia y se presentan como: distorsiones visuales, visión borrosa de manera moderada, hipersensibilidad solar, irritaciones oculares y deslumbramiento.
Normalmente la distorsión de la forma de la córnea ocurre en un periodo de 10 a 20 años y luego cesa de forma repentina. Conforme la enfermedad se hace más patente los síntomas suelen empeorar y se dan aumentos de mayor gravedad en la distorsión visual, aumento de miopía o astigmatismo y prohibición de uso en lentes de contacto.
En muy pocas ocasiones el queratocono se produce de una manera muy acelerada.
El tratamiento para esta enfermedad depende la severidad en los síntomas que se presenten. Es decir, en las primeras etapas el procedimiento sería la utilización de gafas para corregir los pequeños problemas visuales que pueda acarrear. En etapas más avanzadas del proceso, sería posible el uso de lentes de contacto rígidas que ayuda a que la luz se refracte correctamente sin distorsiones.
Existen unos dispositivos denominados Intacs que se utilizan para modelar la forma de la córnea para evitar que adopte la forma protuberante característica del queratocono. Estos dispositivos se encuentran homologados por la Administración de Drogas y Alimentos (FDA, por sus siglas en inglés).
También se está empleando el cross-linking. Este tratamiento consiste en utilizar un láser y unas gotas especiales que fortalecen las fibras de colágeno que conforman la córnea. El tratamiento podría ayudar a aplanar o endurecer la córnea, evitando su deformación.
Por último, si los tratamientos no han aportado el resultado deseado, quedaría la opción de un trasplante de córnea, que da de manera general muy buenos resultados, aunque la recuperación de una adecuada visión tarda alrededor de un año.
