La población que se encuentra en los países desarrollados o en vías de desarrollo, viven con una alta dependencia de las nuevas tecnologías como los Smartphone. Por ello, no pueden permitirse el no proteger y revisar sus ojos con regularidad por los oftalmólogos.
En el último año se registró que el número de personas con problemas de visión en el mundo alcanzaban los 285 millones, de las cuales 39 millones son ciegos. Sin embargo, el 25% de los casos de ceguera evitable que se producen podrían haberse evitado con tan sólo un acceso regular al oftalmólogo, es decir, con un acceso igualitario a la sanidad ocular para todos.
Para conseguirlo, la Agencia Internacional para la Prevención de la Ceguera (IAPB) lanza un proyecto con el que quiere concienciar a la sociedad de la importancia que tiene ese acceso a la salud ocular, ya que los ojos son uno de los pilares más importantes en nuestro modo de vida.
A dicho proyecto se han sumado la Organización Mundial de la Salud (OMS) y la Fundación del Instituto de Microcirugía Ocular (IMO) con el objetivo de conseguir que el 25% de la tasa de ceguera evitable se reduzca en un periodo de cinco años gracias a una atención oftalmológica universal y de calidad.
