La presbicia o vista cansada es un defecto visual consistente en la dificultad para ver objetos y textos en visión de cerca. Está asociada a la edad y empieza a manifestarse entre los 42 y 50 años, aunque puede aparecer antes o después por diversos motivos.
No queda claro el origen del defecto visual o refractivo llamado presbicia, aunque la mayoría de estudios aluden a la pérdida de elasticidad del cristalino para cambiar su curvatura. Otros hablan de la pérdida de funcionalidad del músculo ciliar para hacer trabajar al cristalino, aunque por norma general es una suma de los dos.
Cuando se inicia la presbicia, el musculo ciliar no es capaz de hacer trabajar a las fibras que lo unen al cristalino. Dicho cristalino de por sí, ya contará con pérdida de elasticidad, con lo que no podrá modificar convenientemente su curvatura y no será posible enfocar objetos próximos.
La mejor forma de evitar este problema es estar atento a los síntomar y acudir al especialista lo antes posible. Los síntomas de la vista cansada, son fáciles de reconocer: empezamos a ver borroso de cerca pero alejándonos el objeto que queremos ver, la nitidez es mayor.
Como es un defecto refractivo que avanza con la edad, llegará un momento en el que no podamos leer sujetando el libro, periódico, móvil, etc. También pueden aparecer otro tipo de síntomas como cansancio ocular, dolor de cabeza, picor de ojos o somnolencia anormal.
